El método Agile es un proceso revolucionario para diseñar y desarrollar en el menor tiempo posible y con máxima rentabilidad. Esta metodología está centrada en ayudar al desarrollo de proyectos que necesitan rapidez y adaptabilidad para las necesidades del cliente, con el objetivo de dar un resultado óptimo y personalizado.
Los negocios hoy en día deben ser capaces de adaptarse sobre la marcha a las necesidades del mercado. En la metodología Agile no se planifica ni se diseña el producto por adelantado, evoluciona basándose en las necesidades del cliente mientras se elabora el producto. Mediante el feedback del cliente, se evaluará qué es lo mejor para el proyecto.
Se hacen envíos de la situación actual al cliente cada dos semanas (también llamados Sprints) para que pueda ver cómo evoluciona el proyecto. De este modo, el cliente va recibiendo poco a poco novedades y puede dar su aprobación o informar de algún cambio en el desarrollo para alcanzar el resultado deseado.
Los cuatro pilares clave de Agile son los siguientes:
- El equipo y las las colaboraciones es su pilar más fundamental
- Ser funcional y proactivo
- Colaboración con el cliente por encima de todo
- Adaptabilidad por encima de seguir con con el plan inicial
Índice
Los beneficios de trabajar con Agile
A diferencia los estilos tradicionales de desarrollo de proyectos, estas son las ventajas de trabajar con la metodología Agile:
- Gran versatilidad, orientada a la consecución de objetivos
Está enfocado a la consecución de objetivos, respetando los tiempos de entrega de los mismos.
- Ayuda a no perder el tiempo realizando tareas innecesarias
El método Agile tiene estrategias de largo período, pero con revisiones de cómo se van logrando los objetivos. Así será más sencillo adaptarse a los objetivos del cliente si hay algún cambio.
- Transparencia total y absoluta
La forma de trabajar es a través de la metodología Scrum (entregas de trabajo cada dos semanas), y mediante reuniones diarias para analizar en qué estado se encuentran las tareas y qué falta por terminar. Esta interacción entre empresa-cliente ayuda a que el producto final sea exactamente lo que el cliente tenía en mente antes de realizar el proyecto, asegurando así cumplir con todos sus requisitos.
Las metodologías Agile más populares
Han surgido diferentes variantes dentro de esta metodología Agile. Estas 2 son las más utilizadas en la actualidad:
Scrum
Scrum es un proceso de gestión que mejora el desarrollo de productos para satisfacer las necesidades de los clientes. Se basa en una estructura de desarrollo incremental. El proyecto se divide en tres etapas fundamentales: análisis, desarrollo y testeo. En Scrum cada trabajador es responsable de terminar las tareas en los tiempos acordados.
Utilizar Scrum tiene 4 beneficios destacados:
- Mejora la flexibilidad y el compromiso durante un proyecto
- Aumenta la colaboración e interacción con el cliente
- Asegura buenos resultados para el cliente
- Incrementa el ROI (retorno de la inversión)
Kanban
Kanban es un proceso que trabaja mediante un diagrama que dispone de tres columnas donde se clasifican las tareas por pendientes, en proceso y terminadas. Gracias a esta técnica, los miembros del equipo saben cual es el estado del proyecto en todo momento, asegurando así una total transparencia dentro del proyecto y del equipo.
Este enfoque pretende abordar los problemas relacionados con la distribución del trabajo, aumentando la rentabilidad e incrementando el control sobre la capacidad operativa de forma proactiva, reduciendo los cuellos de botella a nivel organizativo. Utilizando Kanban, mejorará la eficiencia de la producción y, por lo tanto, mejorará notablemente la rentabilidad del negocio.
Utilizar Kanban tiene beneficios 4 destacados como:
- Eliminar procesos/tareas que no son necesarios o sobrantes
- Optimizar la forma de trabajo
- Incrementar los tiempos de producción
- Mejorar la comunicación interna de la empresa
Resumen del artículo
Hemos visto de qué trata el método Agile, sus principales características, así como sus enormes ventajas que ofrece como un sistema de trabajo, ofreciendo una gran versatilidad y transparencia para todos los trabajadores.
Además, dentro de este método hay pequeñas variantes como la Scrum y Kanban, que están enfocados a la consecución de objetivos minimizando al máximo los gastos de la empresa. Nosotros creemos que la adaptabilidad en una empresa es vital hoy en día, y el método Agile, destaca, sobre todo en esta faceta.